Poesía Coreana
Poesía coreana
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PINTURA DE BAMBÚ
Oh Sae-young (n. 1942)
Suavemente,
como nave que se inclina,
afuera sopla la tormenta.
Sentado, solo, a la luz de una vela,
preparo la tinta china, con paciencia.
La montaña es un mar nocturno
y cuando llega el viento feroz
el bosque de bambúes es una ola gigantesca
que se estrella contra el farallón;
y los robles, como pequeñas olas,
rugen y muestran sus dientes blancos.
La cabaña en peligro,
velero a merced de un mar furioso.
Debo dibujar un mapa con mis propias manos
para surcar las aguas de este mar violento.
Tranquilo,
se mueve el barco.
Bajo la frágil luz del puente,
pinto bambúes con la tinta negra
sobre la página en blanco.
Mar de penurias, la vida. Entonces,
¿cómo podrá ser la montaña la misma siempre?
Un velero solitario a la deriva
en el mar nocturno, bajo la tormenta.
Un pincel que tiembla.
RÍO DE LAS MONTAÑAS VERDIAZULES
Hwang Yin-yi (1520~1560)
Río de las montañas verdiazules
tu andar veloz no alardees,
pues una vez que al amplio mar arribes
no será fácil volver.
La luna anega colinas desiertas,
sosiega el paso una vez.
POEMA
Yun Seondo (윤선도, 1587–1671)
Sosteniendo una copa me siento y contemplo las lejanas colinas.
Si viniera mi amor, si viniera, alegraría este momento.
Yo adoro las montañas, pero ellas no hablan, no ríen.
CANCIÓN A LOS CINCO AMIGOS
Yun Seondo (윤선도, 1587–1671)
Cuántos amigos me rodean: agua, piedra, pino y bambú.
Y me deleito con esta luna que surge sobre las montañas.
Permítanme tener sólo a estos cinco amigos.
Agua
Siendo clara la nube, a veces se torna negra.
Siendo límpido el viento, continuamente deja de fluir.
Mas sólo el agua límpida y fluida.
Piedra
La flor nace y se marchita con facilidad.
La hierba azul de pronto es amarilla.
Mas la piedra permanece.
Pino
Con el estío florece y con el invierno decae.
El pino no sabe de nieve ni de escarcha.
Sólo sabemos por la escritura de su raíz que va a los infiernos.
Bambú
No es árbol ni hierba.
¿Quién le envidia su rectitud y su vacío?
Así es el gusto de la cuarta estación por lo verde.
Luna
Eres pequeña para volar tan alto e iluminar todo lo creado.
Al anochecer eres la única iluminación.
Y eres mi amiga por callar tu propia contemplación.
LENTO CRISANTEMO
SO KO-JONG (1420- 1488)
Los crisantemos florecen con lentitud este año,
no he hallado la dicha de otoño junto al cerco oriental.
Descorazonado, sin duda, está el viento oeste: sopla
en mi encanecido pelo, en lugar de hacerlo en los amarillos crisantemos.
EN UNA NOCHE LLUVIOSA DE OTOÑO
CH'OE CH'I WON (n. en 857)
Amargo surge mi canto en el viento de otoño;
tan pocos amigos he tenido en toda mi vida.
Afuera la ventana gotea la lluvia de medianoche
bajo la luz de la lámpara, mi pensamiento deriva muy lejos.
POEMA
Myongok (s. XVI)
La nieve cae sobre el pueblo de montaña
y entierra el sendero de piedra.
No abras el portón de ramas,
¿quién podría venir aquí a visitarme?
Mi única amiga es
una tajada de luna radiante.